Un microchip ofrece un modo de identificación permanente para el animal. Contiene un número de identificación único que pueden escanear los veterinarias, los centros de acogida de animales y los agentes de control de animales.

Además, los microchips están reconocidos internacionalmente, lo que los hace muy útiles (y en la mayoría de los casos obligatorios) si quieres viajar con tu mascota.

La implantación de microchips en mascotas ofrece ventajas tanto para el animal como para su propietario:

  1. Encontrar mascotas perdidas o robadas: Los microchips aumentan las posibilidades de encontrar mascotas perdidas, ya que contienen información de identificación única que pueden consultar veterinarios o tiendas de mascotas. También evitan el robo de mascotas al tener los datos de quién es su verdadero dueño.
  2. Seguridad y comodidad: A diferencia de los collares, que se pueden perder o quitar, los microchips se implantan bajo la piel, lo que garantiza una forma de identificación permanente que resulta difícil de modificar.
  3. Económico y para toda la vida: La implantación del microchip es un procedimiento único que requiere un mantenimiento mínimo y revisiones anuales por parte de un veterinario.
  4. Otras ventajas: Algunos fabricantes de microchips están añadiendo características adicionales a sus chips, ofreciendo funciones adicionales más allá de la identificación básica.